Ya sabéis que estoy en si segunda juventud, intento cuidarme y entre otras cosas siempre que puedo salgo a caminar por las mañanas, pues bien, hoy llegando a casa y, sobre las diez menos diez he recibido un wasap que decía así: Pilu, pásate pronto por la tienda, he recibido vestidos de verano monísimos y de tu estilo. Respuesta inminente: voy, acompañada de un imoticono de una carita super feliz.
Vivo muy cerca de un centro comercial, cuando me vine a vivir a Alcalá me lleve una grata sorpresa al comprobar que tenía aquí una tienda de ropa de la que era clienta en Madrid, y encima la dependienta era la mejor de todas, ambas nos alegramos de vernos, y con el tiempo nuestra relación va camino ya de amistad, tenemos confianza y precisamente por eso nuestros números de teléfono, me avisa cuando recibe mercancía que sabe puede ser de mi agrado, presume de conocerme y como dice ella de saber cual es mi estilo, que no es otro que ropa cómoda, mas juvenil que de abuela, minifaldera, sueltecilla mejor que ajustada y por supuesto estampados florales, lisos, cuadros o rayas, admito cualquier tipo menos de animales, especialmente de leopardo, me da salpullido de pensarlo aunque respeto a quien le guste.
A las 10 y 5 me presento en la tienda con mi indumentaria típica de a esas horas de la mañana cuando salgo a caminar, hoy llevaba para la ocasión camiseta de tirantes y mallas negras,(color apropiado para enterrar la semana y dar la bienvenida al finde) deportivas del mismo color y una pinza en el pelo para prender un recogido rebelde y mal hecho pero monísimo y aparente para mi actividad deportiva. Pues eso, entro a la tienda y mi querida dependienta y casi amiga me enseña tres vestidos, me pruebo el primero, de tirantes con corte en la cintura y la falda con un poco de vuelo, de fondo negro y estampado floral en muchísimos colores, una alegría¡¡¡paso al probador, no me disgusta, salgo a pedir opinión por que a mí mi casi amiga y sin embargo dependiente me asesora sinceramente, lo aprueba, entra una señora mayor, me mira y dice: hay que vestido más bonito¡¡¡¡ me gusta para mi nieta, que tipín más bonito que hace¡¡¡¡¡ sorprendida y agradecida a la vez miro a la tierna abuelita y la digo: muchísimas gracias señora, se agradece que estando sudada y casi en ayunas me diga Vd. que tengo tipín (con el agravante de mi edad agrada más todavía), la mujer insiste en que sí, que lo mío es tipín, y la digo que un cumplido más y la invito a desayunar, el vestido en cuestión se queda encima del mostrador apto para ser cobrado.
Paso a probarme el segundo, también de tirantes, estampado floral, en tonos rosas, muy minifaldero y suelto, apenas se distingue a Jesús (nombre de mi barriga, quien no sepa de que hablo que se lea el relato de alien, parásitos y demás barrigas y se enterara), salgo encantada del probador pero espero la aprobación del público, apruebo¡¡¡¡¡ esta hecho para mí, que ilusión¡¡¡¡ que un diseñador que no me conoce de nada se inspire en mi para hacer un pingo playero¡¡¡¡ entra la propietaria de la zapatería de arriba, caramba¡¡¡¡ exclama exageradamente, tengo unas sandalias que te quedarían ideal con ese vestido, la digo: huy que bien¡¡¡¡ pero tengo en casa varias, y manoletinas y chanclas...., pero niña que son los mismos tonos de rosa, y ya van dos¡¡¡¡ cariño llámame todo lo niña que quieras pero no te los voy a comprar, te llamo niña por que lo pareces y las tengo muy baratas, son de hace dos temporadas, no están ni en el escaparate, que número tienes de pie ?? por que creo recordar que eran pequeñas, el 36 la digo cansinamente, espera que ahora vengo, a los cinco minutos se presenta con las sandalias, que casualidad niña son de tu número del 6. Bingo¡¡¡ la digo yo, que alegría que me acabas de dar mira tu por donde¡¡¡, saca las putas sandalias y las puñeteras del mismo tono, con tanta molestia y dejándomelas en 6 euros decido quedármelas.Tercer vestido, también de tirantes, tonos azules, estampado floral, algo más de vestir, tela super transparente pero está forrado, me encanta, me gusta, me queda bien, salgo a pedir opinión, la vieji me dice que me hace un pecho precioso, mira tú¡¡¡¡ a mi edad, aprobada por mi casi amiga y sin embargo dependienta, por la vieji y la conocida propietaria de la zapatería a la que le recuerdo que el pasado verano ya la compre sandalias azules. Me lo quedo, como no¡¡¡ si me hace un pecho precioso¡¡¡¡¡
Asique llegue a mi casa, cansada, casi en ayunas, sudada, piropeada, conocedora de tener un vestido que me hace el pecho precioso, endeudada ...por que los vestidos y las putas sandalias están reservados pero no pagados, (no salgo a caminar con dinero ni con tarjeta que así evito tentaciones y me concentro en mis quehaceres deportivos.) .Y ya saben lo que dicen que aunque la mona de vista de seda.... Monísima cierta ropa queda¡¡¡¡¡¡
y alguna, con suerte... al pecho precioso sienta¡¡¡¡
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