miércoles, 7 de junio de 2017

Aprendo, me divierto y casi magia he descubierto.- Mi limón, mi limonero, a que crezcas yo te espero









Ajo, cebolla y limón y déjate de inyección.




Limonero, es un pequeño árbol frutal perenne. Su fruto es el limón, una fruta comestible de sabor ácido y extremadamente fragante que se usa principalmente en la alimentación.


Hoy os quiero presentar a mis incipientes limoneros.

Lo primero que hay que hacer es conseguir su semilla, para eso cortaremos longitudinalmente el limón y retiraremos las semilla con cuidado de no dañarlas, las lavaremos bien para limpiar los restos de pulpa que se hayan podido quedar adqueridas y después las plantaremos directamente en tierra o intentaremos su germinación antes de plantarlas.

Yo preferí germinarlas antes, para conseguirlo cubrí las semillas con papel absorbente y lo humedecí, no empapé, después lo envolví en papel de plata y ya sólo tenía que esperar y asegurarme que no les faltaba humedad.



Pasaron los días asegurándome de que a las semillas no le faltara humedad, hasta  que un día, por fin, comenzaron a apuntar sus raíces. Cuando alcanzaron un tamaño que consideré apropiado las planté en una maceta  para que la tierra les aportara los nutrientes necesarios para su crecimiento.








A los pocos días comencé ver ya sus pequeños brotes.








Y ya sólo fue cuestión de que la madre naturaleza siguiera su curso.

Poco a poco los brotes han ido creciendo y de momento ya son cinco los limones que tengo brotados, tres en una maceta y dos en otra. 




En estos momentos tengo más semillas en proceso de germinación, con algunos arbolitos intentaré quedarme y otros los plantaré en el lugar que encuentre más adecuado para ellos.

Mi limón, mi limonero, entero me gustas más ¡¡¡






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