lunes, 9 de enero de 2017

Vaya guasa con mi wasap







Cuaderno de bitácora.

Semanas de familias, viajes, nieblas, crecimientos personales, trabajos, enfriamientos, balances, pero como siempre en contacto y donde lo más destacado ha sido:



Cristina.- Nuestra pequeña ha pasado estas semanas trabajando, trabajando y trabajando, que barbaridad laboral ¡¡¡¡ . Que la Navidad propicia un aumento en las ventas en los comercios y en  algunos caso exagerado no es secreto para nadie, como tampoco lo es que los trabajadores del sector son quienes sufren ese aumento y ven aumentados sus niveles de estrés y de intensidad laboral, hasta ahí todos de acuerdo, no ?? pues nuestra Cristina tampoco ha sido una excepción y se ha pasado las semanas navideñas agotada no, lo siguiente, ya que se ha pasado de la mañana a la noche, explicando, vendiendo, cobrando, colocando, explicando, cobrando, volviendo a colocar, volviendo a explicar, volviendo a cobrar y así día tras día. Prácticamente sin vida privada se la han ido pasando estas semanas, tanto que si no llega a ser por Amparo no hubiera podido ni cenar la noche de Nochebuena ni la de Nochevieja, porque esos dos días también los tuvo que trabajar, hasta las seis de la tarde, pero los tuvo que trabajar ¡¡¡, Joer ¡¡¡. De ocio, lo que entiende por ocio y disfrute para salir de la rutina para divetirse un poco, solo disfruto la última noche del año, si bien no tenía ganas de salir ni gracia la hacía, sus amigas se empeñaron en sacarla y no pararon hasta que consiguieron su ok. Finalmente pudo dormir ya de día tras degustar los famosos churros con chocolate bien entrada la mañana. Caramba pequeña ¡¡¡¡ vaya semanas ¡¡¡¡. Su balance del año: Estresante ¡¡¡¡



Paula.- Nuestra amiga poseedora de un útero de libro ha pasado unas semanas variadas y de lo más navideñas. Paula ha pasado este año un surtido navideño de acontecimientos de lo más variado, por un lado sus vacaciones navideñas se han visto reducidas drásticamente por exigencias del guión, a última hora los clientes se acordaron de que su empresa existía y desde el jefe hasta el último empleado han visto reducidos sus días de descanso a la mínima expresión, que fatalidad ¡¡¡¡ Pero para vengarse de su inesperadas jornadas laborales, en cuanto ponía los pies en la calle se iba de juerga con el grupo de turno, la Navidad es una época que le encanta a nuestra Paula y no ha permitido que nadie se la estropeara, bien hecho ¡¡¡. Las comidas y cenas más significativas las ha pasado en familia y las últimas del año, para dar más emoción al asunto, en la cama y con fiebre como consecuencia de un enfriamiento laboral del tamaño de Nevada. Una rotura en la caldera de la calefacción tuvo a los trabajadores trabajando a 12 grados de temperatura, logrando un enfriamiento laboral que terminó con toda la plantilla fría y enfermita, que faena ¡¡¡. A mejorarse chicos ¡¡¡ Su balance del año: Positivo ¡¡¡ Max Power se ha pasado estas semanas de vacaciones laborales, lo que le ha propiciado estar hecho un lío con el cambio horario y poder ejercer de cuidador ejemplar, que mono ¡¡¡. Cuñadito buenorro en cambio pasó las navidades en modo rural, acompañado de Kas y Trina, sus padres, partieron hacia el pueblo dispuestos a pasar las fiestas con el resto de familia que allí viven. 


Milagros.- Nuestra madraza ha pasado unas semanas familiares y en su salsa. Para empezar se cogió dos días que la debían en el trabajo y la semana de nochebuena se fue con el señor con cara de buena persona pese a ser aficionado al barça al País Vasco. Allí disfrutó de unas magníficas nieblas no aptas para los no amantes de las las nieblas, además de buena comida, buenos vinos, preciosos paisajes nublados, charcos y demás, pero lo mejor de todo fue poder estar los dos solitos, ohhhhh ¡¡¡¡¡. De regreso se fueron directos hasta el pueblo de nombre papal a celebrar la Nochebuena y la Navidad con la familia del aficionado culé, allí se juntaron ciento y la madre más la madre de alguno y lo pasaron fenomenal. La nochevieja y el año Nuevo lo pasaron con la familia de nuestra amiga, repartidas entre las casas de su hermana la cachonda y la suya propia celebraron la tradicional última cena del año y la primera comida en modo simpaticón y familiar, si bien el grupo fue bastante menos numeroso que en la celebración anterior, no desmereció en ningún aspecto las veladas. Su balance del año: Familiar ¡¡¡


Amparo.- Nuestra funcionaria favorita en peligro de extinción ha pasado unas semanas bastante activas. Para empezar y para sorpresa de todos no ha faltado a su trabajo ni un sólo día, alucinada nos ha dejado a todos ¡¡¡ Para continuar ha celebrado comidas y cenas con todo tipo de personas y con todo tipo de excusas, desde la típica con las chicas de la tarde de chicas, pasando por la de compañeras de otras secciones, con las de otros departamentos, con las de otros destinos, también ha reunido a amigas esporádicas desde su más tierna juventud hasta las más actuales y así podríamos seguir con unas cuantas celebraciones más. Las más entrañables las ha celebrado con su familia más cercana y con Cristina, que ya es de la familia. Amparo ejerció como siempre de perfecta anfitriona y en sus celebraciones no faltó el más mínimo detalle, el palizón culinario que se dió fue del tamaño de Nebraska pero a nuestra amiga en estas fiestas la gusta darse ese tipo de palizones. La nota triste la puso un viaje exprés que se vio obligada a realizar para acudir al entierro de un familiar y unas tristísimas visitas al hospital para visitar a una amiga enferma. Después de todo aunque sea navidad la vida continua con total normalidad, con sus luces y sus sombras y con sus alegrías y sus penas. Su balance del año: Entretenido ¡¡¡ Nero también trabajó en estas fiestas, se vio obligado y no pudo negarse, pero el susodicho lo aceptó con una resignación propia de un mártir. Gran hombre, si señor ¡¡¡


Piluca.- Mis semanas han resultado ser unas semanas de lo más entrañables y familiares, tan familiares han sido que si las navidades hubieran durado 5 días más, hubieran rayado ya en el  síndrome del aborrecimiento familiar. Estos días reconozco que también me han servido para descansar, la verdad es que estaba tan necesitada de descanso que por una vez en mi vida me he concedido ese homenaje. Cuando digo que he descansado me estoy refiriendo a que he podido reposar física y mentalmente, porque la verdad es que no sé de cual de esos dos descansos era del que más necesitaba. También me han servido para hacer balance de mi año, balance que he optado por concluir que ha sido un año bastante equilibrado. Pero si por algo se ha caracterizado el pasado año ha sido por conocer a muchas personas por diferentes motivos y también me ha servido para reconocer, si para reconocer a las que merecían la pena mantener a mi lado y a las que no, ya que confieso que este año he conocido a personas bastante petardas y tóxicas. Pero lo mejor de todo y de lo que más orgullosa estoy es que he sabido avanzar en mi crecimiento personal al decidir prescindir de gente que no quiero que formen parte de mi vida. Orgullosa estoy de haberlo hecho y más de haberlo hecho de forma discreta, educada y elegante. Por cierto mi primera recomendación del año será aconsejar realizar esa práctica a todo aquel que tenga tóxicos en su vida. Por una vida y una salud mental sana y saludable, brindo por ello ¡¡¡




Y yo en mi línea, no he salido de juega la última noche del año, tampoco he celebrado juergas varias cada vez que ponía un pie en la calle, no he visitado el Pais Vasco, ni he celebrado multitud de comidas ni cenas con la excusa de celebrar la navidad, sin embargo he seguido disfrutando con el intento de intentar conseguir un huerto urbano, de que el proyecto iniciado con Ana para que intente conseguir más autonomía e independencia siga resultando todo un éxito y de haber estado en contacto con parte de mi gente.




Quiero aprovechar la oportunidad que me brindo en este espacio, para brindar con todos vosotros por este año nuevo que recién comenzó. Brindo por seguir compartiendo con todos vosotros nuestras andanzas y para ello utilizaré vino sin alcohol, si lo habéis leído bien, sin alcohol, así me aseguro que el brindis es acto para todos los públicos. Las fotografías que acompaño son de unas botellas de vino, por supuesto sin alcohol, que trajo Marta para que su hermana y su madre, que soy yo, pudiéramos brindar con todos.
Por vosotros ¡¡¡
Feliz año nuevo ¡¡¡¡




Y esto ha sido todo por estas semanas, esperemos que en la que viene haya más y si puede ser mejor.



Nos vemos ¡¡¡¡







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