Cuando Ana era pequeña para ayudarla a desarrollar sus habilidades manuales la apuntamos a clase de maquetas.
Lo que más nos sorprendió fue que no solo fuera capaz de conseguir notablemente mejorar sus habilidades, sino que pudiera realizar pequeñas obras de artesanía.
Os presento su primer trabajo, una casita para el nacimiento navideño, pero no solo trabajó haciendo la casa, los árboles, pozo, suelo, todo lo que veis lo hizo ella.
Vereís que no solo se necesitaba habilidad, también mucha dosis de paciencia.
Como siempre para mí es un orgullo, no solo por el resultado final que os aseguro es una preciosidad, sino como siempre por todo el trabajo que hay detrás, el esfuerzo y la capacidad para superar su dificultad.
A disfrutarlo¡¡¡¡¡¡¡¡
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