Ya estoy hasta las narices ¡¡¡

Ya estoy hasta las narices ¡¡

de que todo me organices

de que no te tranquilices

de que siempre me utilices.

Yo ya empiezo a estar cansada

de estar siempre preocupada

de ser la gran olvidada

de ser siempre la ignorada.

Ya estoy hasta las narices

que por todo te horrorices

de que todo lo analices

que mi vida paralices.

Yo ya empiezo a estar cansada

de nunca ser escuchada

y de sentirme apenada

y de no importarte nada.

Ya estoy hasta las narices

que a veces me atemorices

que con tu maldad me hechices

que no seamos felices.

Pero ya no estoy cansada
dejé de estar preocupada
comienzo a ser escuchada
y a no sentirme apenada

Sola supe poner fin

por no tener nada afín

se acabó este folletín

por imbécil y ruin.

NOTA: Para nada es un poema autobiográfico.
             He presenciado esta semana las confesiones de una mujer que me han impresionado.
             Jamás pensé que mi conocida pasaba por lo que estaba pasando, por suerte para ella ha
             decidido poner fin y ha sido capaz de decir basta ¡¡¡¡
             Enhorabuena ¡¡¡¡¡
             Para ti.
             Para todas las que han podido hacer lo mismo que tu ¡¡